GRANATE

El granate es una piedra muy energizante y regeneradora. Revitaliza, purifica y equilibra la energía aportando serenidad y pasión cuando es apropiado. Se dice que es capaz de avisar de un peligro que se aproxima y antiguamente se usaba como talismán protector. El granate es una de las piedras más hermosas, inspira amor y devoción. Equilibra el impulso sexual y alivia la desarmonía emocional. El granate rojo, en particular, estimula la elevación controlada de la energía kundalini y sustenta la potencia sexual. Es una piedra muy útil en tiempos de crisis, en situaciones en las que no parece haber salida, o cuando la vida se ha fragmentado o es traumática. Fortalece y activa el instinto de supervivencia, llevando coraje y esperanza a situaciones aparentemente desesperadas. Bajo su influencia la crisis se convierte en un reto por superar.

El granate tiene una fuerte vinculación con la glándula pituitaria y puede estimular la consciencia ampliada y el recuerdo de vidas pasadas.

Psicológicamente el granate afila tus percepciones de ti mismo y de los demás. Disuelve los patrones de conducta profundamente arraigados que ya no te sirven y permite superar la resistencia y el sabotaje inconsciente.

Mentalmente el granate ayuda a abandonar viejas ideas obsoletas y emocionalmente libera las inhibiciones y tabúes. Abre el corazón y otorga confianza en uno mismo.

APATITA

La apatita tiene la propiedad de inspirar. Es un punto de encuentro entre la consciencia y la materia, una piedra sintonizada con el futuro y sin embargo, conecta con vidas pasadas. Desarrolla dones psíquicos y la sintonía espiritual, profundiza la meditación, y favorece la comunicación a todos los niveles. De gran ayuda para elevar la energía kundalini.

Psicológicamente incrementa la motivación y acumula reservas de energía. Favorece la extroversión y resulta de gran ayuda para niños hiperactivos o con problemas de autismo. Estimula la creatividad y el intelecto y expande el conocimiento de la verdad aliviando la pena, la apatía y la ira.

Reduce la irritabilidad y ayuda a superar el agotamiento emocional.

La apatita ayuda en la sanación de los huesos y favorece la formación de nuevas células. Ayuda a la absorción del calcio y a la formación de cartílagos, huesoso y dientes. También mejora la artritis y los problemas de las articulaciones.

La apatita azul está relacionada con el chakra Vishuddhi, ayudando a hablar en público, potencia la comunicación grupal y sana el corazón y las enfermedades emocionales.